martes, 8 de diciembre de 2015

de DIBUJOS DE VIDAS IMPROVISADAS a DIBUJOS DE UNA VIDA IMPROVISADA

El cambio del título, ha sido sólo una consideración: ¿quién soy yo para determinar que aparte de la mía, las vidas de los demás sean improvisadas?

Yo, intenté diseñar la mía. Me siento ahora más tranquilo sabiendo que los resultados no son los proyectados. Esta idea, a la fuerza, mitiga el autocontrol de autor de sí-mismo como proyecto. A lo sumo, y pienso en las personas en general, somos autores de un borrador (que pareciera que el editor nunca quisiese aceptar). 

Mariam, Asturias, lo inmediato, Eraser

A esto me refería en la entrada que lo precede. Aunque no hablé ahí de lo inmediato.
Yo preciso de la inmediatez de acceso al recurso; y dibujar con los dedos en el móvil lo permite. De ahí viene mi pregunta a mí mismo sobre si ¿soy vago? El dibujo está realizado a través de la aplicación Sketcher Pro.
Admito que me fascina, y estimula, ese desafío constante entre, lo que un milisegundo antes quieres trazar y la rebeldía del trazo que fuerza el programa.
Sé que no dibuja el programa, que lo hago yo.
Esto siempre será así cuando uno de los pinceles sea "Eraser".

Mariam. Asturias. Dibujar, nada tienen que ver.

Sólo la coincidencia en la producción. El dibujo, y por ello siento culpa, fue relegado a un segundo lugar indefinido. Llevo meses investigando algo que observo cada día. La investigación es mía, y supone mucho.

Pero dibujar también. ¿Soy vago?..., quizás poco flexible para cambiar entre cosas que me gustan. Pero la investigación tiene un elemento clave para "nosotr@s" , es útil. Mientras que en mis dibujos, no aprecio esa utilidad "que tienen que tener mis" cosas.

Volver, a dibujar ha sido ahora útil. Así de fuerte es la culpa, que te retorna siempre a donde quieres saldarla.